El fentanilo, según el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos, es un analgésico opioide sintético empleado en el tratamiento del dolor crónico, con un valor que podría alcanzar los 3 mil pesos chilenos.
Sin embargo, este opioide sintético, originalmente desarrollado como anestesia, está generando una alarma creciente en Estados Unidos. Solo en el año 2022, más de 50 mil personas perdieron sus vidas debido a sobredosis de esta peligrosa sustancia.
El Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de Estados Unidos va más allá al clasificar al fentanilo como 100 veces más potente que la morfina.
Este año, el Departamento de Justicia de EE.UU. ha tomado medidas legales cruciales. Se iniciaron procesos penales contra cuatro empresas químicas con sede en China y ocho ciudadanos chinos, todos implicados en el tráfico de precursores químicos destinados a la fabricación del fentanilo.
Es crucial destacar que la Administración para el Control de Drogas (DEA) realizó un decomiso impresionante, incautando «más de 200 kilos de precursores relacionados con el fentanilo», según un comunicado oficial. Esta cantidad representaba una amenaza letal para 25 millones de estadounidenses, según lo informado por el Departamento de Justicia.
¿De donde viene el Fentanilo?
Las investigaciones judiciales señalan que la cadena de suministro comienza en China. Amarvel Biotech, un fabricante con sede en Wuhan, provincia de Hubei, China, ha estado exportando suministros utilizados en la elaboración de fentanilo.
En 2022, el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, reveló que la DEA y otras agencias de aplicación de la ley confiscaron más de 50.6 millones de píldoras recetadas falsas mezcladas con fentanilo. Esto es más del doble de la cantidad incautada en 2021. Además, se incautaron 10,000 libras de polvo de fentanilo (453 kilogramos).
Las preocupaciones también se extienden a la posible presencia del fentanilo en Ecuador. Julieta Sagnay, una experta en desintoxicación, advierte que esta sustancia habría llegado a su país. Se cree que llegó desde China, pasando por México y siendo elaborada con precursores químicos similares a los utilizados en productos cotidianos como champú. Este tipo de fentanilo en forma de polvo se estaría consumiendo en las calles, aumentando aún más los riesgos asociados a esta peligrosa droga.
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