El 10 de febrero da inicio al Año del Dragón de Madera, coincidiendo con la segunda luna después del invierno boreal. Este período, que se extiende hasta la próxima luna llena durante 15 días, reúne a millones de personas alrededor del mundo para celebrar el Año Nuevo Chino.
El término «Fiesta de la Primavera» es comúnmente utilizado en China para describir este evento, marcando el fin del invierno y el comienzo de la primavera. Es uno de los festivales más importantes del país, celebrando el inicio del nuevo año según el calendario lunar chino.
Más de 1.500 millones de personas participarán en las festividades del Año Nuevo Lunar este año, desencadenando la mayor migración humana anual. Este fenómeno se manifiesta cuando millones de personas viajan para reunirse con familiares y amigos, un testimonio de la importancia cultural del evento.
En otras regiones de Asia, como Vietnam (llamado Tet Nguyen Dan), Corea del Norte y Corea del Sur (Seollal), y Mongolia (Tsagaan sar), se celebran festividades similares, cada una con sus propias tradiciones y peculiaridades.
La preparación para el Año Nuevo implica una limpieza a fondo en los hogares chinos para alejar la mala suerte del año anterior. Las reuniones familiares se centran en platos especiales, como fideos, hot pot, albóndigas, y otros manjares que simbolizan la buena suerte para el nuevo año.
Las festividades incluyen fuegos artificiales, atuendos festivos y farolillos rojos. Además, es costumbre regalar sobres rojos (hongbao) con dinero, expresando buenos deseos y fortuna para el año venidero.
Personalidad del Dragón: Según la tradición china, cada año lunar está asociado con un animal del zodíaco y uno de los cinco elementos fundamentales. El 2024 marca el cambio al año del Dragón de Madera, símbolo de buena suerte, fuerza y salud. Personajes famosos nacidos bajo este signo incluyen a Deng Xiaoping, Jack Ma, Salvador Dalí y Keanu Reeves.
Orígenes del Año Nuevo Chino: Se remonta al siglo XIV a.C., durante la dinastía Shang. La mitología china narra la lucha contra un monstruo llamado Nian, cuyos temores a ruidos fuertes, luces brillantes y el color rojo inspiraron las tradiciones actuales.